Paré estos últimos 9 días. Por razones de trabajo, pero también por cansancio. No físico. Mental, que es peor que el otro. Por el asco y la indignación que me siguen provocando los diarios, las revistas, la televisión, los portales de internet. Siempre hay excepciones, desde luego. Pero como tales, son pocas. Valiosas, pero escasas.
Después de 9 días no encontré nada diferente. Tampoco fui ni soy tan ingenuo como para esperar algo distinto. Mirar los diarios, los portales y algunos canales de televisión hoy, mientras la celebración del Bicentenario va generando una explosión de sensaciones y comportamientos que, con el paso del tiempo, se demostrará que hizo temblar los cimientos de nuestro concepto de nacionalidad, provoca en mi un estado de bronca e impotencia que no se si valdrá la pena seguir experimentando de aquí en más.
Por otra parte, no estoy seguro de que este blog, al fin de cuentas, tenga la utilidad que uno le asigna. Y si la tuvo, insistir con esta modalidad sería reiterativo. Cada cual, cada quien, debiera saber ya cuando le mienten y cuando no. Tomar en serio que el consumo de medios no es un simple ejercicio de asimilar las noticias tal como nos las venden. La práctica de la segunda lectura, ya tendría que estar incorporada a nuestra mirada crítica sobre los medios.
De modo que voy a parar un rato. Y replantear de que manera sigo con este espacio. Buscar alternativas, mejorar contenidos, enfocar las cosas de un modo diferente, que aporte y enriquezca más que lo hecho hasta ahora. Y por supusto, se aceptan sugerencias, propuestas, ideas. Porque siempre, dos o mas cabezas piensan más y mejor que una.
Mientras tanto los dejo una invitación. Mi queridísimo amigo y compañero de ruta Marcelo Cena me acercó una excelente entrevista que le realizó a Mikahil Gorbachov en Luxemburgo, en la que no deja tema por abordar. Acabo de publicarla en la sección INFORMES Y DOCUMENTOS. Léanla y compartanla porque vale la pena, con los disensos y acuerdos que sus respuestas puedan generar. Porque en ese debate se crece y se aprende. Además, no todos los días un periodista argentino tiene la ocasión de entrevistar a un personaje como Gorbachov. Se llama Marcelo Cena. Es mi amigo y me enaltece poder publicar su excelente trabajo en mi blog.